Los costes de construcción en edificación residencial subieron un 13,5% interanual hasta septiembre de 2021, frente al descenso del 1,7% que registraban un año atrás, lo que supone que los precios se han disparado más de un 10% en tan solo nueve meses, según refleja el Índice de Costes Directos de Construcción que elabora ACR.
Las subidas registradas en los últimos meses se deben, en gran medida, a la escalada de precios de materias primas, como la madera, el cobre o el aluminio, que ha subido un 35% en nueve meses. “Esto supone que hacer una estructura hoy cuesta un 28% más que hace un año”, ha destacado el CEO de ACR, Michel Elizalde.
Otras subidas significativas son las correspondientes a cimentaciones (+23,5%) o carpintería de madera (+18,3%), seguidas de pintura (+9,5%) o vidriería (+8,9%).
A esto hay que añadir las subidas en el coste de la mano de obra que estuvo contenido durante la pandemia, una tendencia bajista que se ha invertido una vez que se ha recuperado el ritmo habitual de los proyectos y despejado incertidumbres, con un mercado residencial muy dinámico.
“Hay demanda para la compra de 140.000 viviendas al año, pero el sector solo es capaz de producir a un ritmo de entre 80.000 y 90.000 unidades al año, lo que continuará tirando al alza de los precios”, ha precisado Elizalde.
Una situación que solo se puede revertir “colaborando entre todos los actores y recorriendo el camino sin retorno hacia un modelo industrial”, cuyas condiciones laborales de seguridad, estabilidad y confort, son más atractivas para los jóvenes. Un modelo de construcción más respetuoso con el medio ambiente y que contempla mayores estándares de calidad, por no hablar de las ventajas que ofrece a promotores y constructores en materia de control de costes y plazos”, ha indicado el CEO de ACR.
Elizalde ha explicado que este contexto de precios ha tenido un impacto en la rentabilidad de la compañía “totalmente asumible, ya que hemos mantenido nuestro criterio de prudencia en las decisiones de contratación, sin correr riesgos innecesarios”. Un criterio que, a su juicio, debería guiar todas las decisiones que tomen en este momento cada uno de los actores que forma parte de la cadena de producción.