Este hotel está ubicado en la zona de Miramón (San Sebastián), próxima al parque tecnológico y contigua a la zona de hospitales. Se trata del segundo hotel de la compañía Iruña Palace.
Uno de los principales retos que se ha afrontado en esta obra es el gran desnivel existente en la parcela. En algunas zonas hubo que cimentar a más de 30 metros de profundidad para alcanzar el sustrato más resistente.
Este edificio contará con una fachada industrializada con la última tecnología apoyada en GRC, un compuesto de mortero armado con fibra de vidrio, que aporta versatilidad y resistencia.
El hotel estará equipado con 79 habitaciones y suites, que se decorarán con inspiración en las casas señoriales vascas. Se distribuye en planta baja con aparcamiento (cubierto y de superficie), dos plantas de habitaciones y una de semisótano que, aprovechando el desnivel del terreno, albergará la cafetería con impresionantes vistas y el gimnasio.